Ciudad de Vida y Muerte, de Li Chuan

Estamos ante una película tremenda, Ciudad de Vida y Muerte, la ganadora de la Concha de Oro en el Festival Internacional de San Sebastian. Se han dicho bastantes cosas de ella, pero yo creo que lo mejor es que los que lean este blog y quieran hacer algo de caso, vayan a verla inmediatamente, merece la pena. No creo que deje a nadie indiferente, ni que nadie pueda decir que no ha valido la pena pagar lo que piden a los cines. Sólo la fotografía ya merece la pena, con un blanco y negro fantástico que narra bellamente acontecimientos tan siniestros. No vamos a mojarnos aquí sobre la película para no entrar en la polémica sobre si se trata de propaganda o no, pero creo que a estas alturas denunciar la barbarie de cualquier conflicto bélico, es ya de perogrullo. La acción se sitúa en la guerra que enfrentó a Japón con la China en la década de los 30, y la invasión de los primeros de la capital de la China en aquel entonces, Nanking, y las posteriores atrocidades que se llevan a cabo en un pequeño campo de refugiados improvisado donde algunos occidentales intentan salvarse y ayudar a las personas de su entorno. Tampoco queremos entrar en el debate sobre hasta que punto esta Spielberizada esta película, seguro que tiene ciertas concomitancias, pero tampoco tantas como se han dicho. Hay bondades y faltas en la película, pero vale la pena verlo aunque sólo sea por la puesta en escena.

Como queja tan solo hablar de la falta de profundidad de la mayoría de personajes, que ante el catálogo de atrocidades, no parecen desarrollarse más que de una manera muy burda, muy tópica. Por otro lado, para compensar, puede que sea una de las películas en que más se homenajea a las mujeres víctimas de la guerra, que en este tipo de películas suelen hacer papeles de comparsa.
En definitiva, os apremiamos a que la veáis con espíritu crítico y si os apetece, nos explicáis que os ha parecido.