El primer día del resto de tu vida, de Rémi Bezançon, se convierte en una de aquellas películas discretas, que pasan por cartelera quizás de forma desapercibida, pero que merecen ser alabadas. Una película discreta por su forma, con aires caseros, narrando la historia de una familia, de los conflictos que surgen entre ellos y en sus vidas. Una película íntima, que trata temas sencillos de gran profundidad.
Desde aquí queremos recomendar El primer día del resto de tu vida, un filme que destaca por la actuación de los personajes; personajes que evolucionan, que nos hacen llorar, reír, temer, querer, sufrir, soñar… de los cuales aprendemos y nos alejamos. Una película, en fin, pequeña pero cercana, con un guión que conecta con el espectador cotidiano, y que, finalmente, deja muchas puertas abiertas para que fluya la interpretación.
Desde aquí queremos recomendar El primer día del resto de tu vida, un filme que destaca por la actuación de los personajes; personajes que evolucionan, que nos hacen llorar, reír, temer, querer, sufrir, soñar… de los cuales aprendemos y nos alejamos. Una película, en fin, pequeña pero cercana, con un guión que conecta con el espectador cotidiano, y que, finalmente, deja muchas puertas abiertas para que fluya la interpretación.
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