A pesar de haber intervenido en casi 100 películas, la fama de David Carradine se forjó en la década de los 70 por su papel en una popular serie de televisión "Kung-Fu", donde David interpretaba a un monje Shao-lin y que hizo que se le encasillara en personajes relacionados con las artes marciales. Condenado a aparecer en innumerables séries en papeles secundarios o haciendo de malo, Quentin Tarantino lo recuperó para el cine en Kill Bill dando la réplica a Uma Thurman.
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Hace 3 meses
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