Frase cinéfila

"Yo he visto cosas que vosotros no creeríais. Atacar naves en llamas más allá de Orión. He visto Rayos-C brillar en la oscuridad cerca de la Puerta de Tannhäuser. Todos esos momentos se perderán en el tiempo, como lágrimas en la lluvia. Es hora de morir"

BLADE RUNNER Rutger Hauer

viernes, 4 de mayo de 2012

INTOCABLES, de Eric Toledano y Olivier Nakache

No puedo por menos que recomendaros esta película, Intocables, de Eric Toledano y Olivier Nakache, y lo puedo hacer por múltiples razones, puedo justificarlo de muchos modos, pero el principal y para mí, más que suficiente, es que es una película tremendamente divertida.   La historia aparentemente no da para mucho, y más para un drama tremendo que no para una comedia en la que se te escapan las carcajadas en casi toda la película.  Dos dramas humanos muy diferentes detrás de dos personajes antagónicos, en todos los aspectos posibles, hasta en el color de piel, a nivel humano pero también a nivel socio-económico, sentimental, etc.  En estos dramas que están sumidos los dos protagonistas un François Cluzet extraordinario, inmóvil y poco expresivo lo borda, y Omar Sy, tiene la virtud de hacer reír en esta película más allá del guión, pero te ríes con él, no de él, para nada es un personaje bufo sino contundente.  Partiendo de este drama, que se alarga, la película tiene el acierto a mi entender de no tratarlo más que lo justo, sin caer en sentimentalismos baratillos y fáciles en los que se puede caer, tanto en uno y otra caso, sin profundizar y pasando casi de puntillas, porque la película tiene sobre todo humor, mucho y bueno, del que te hace sonreír, con inteligencia, pero también da lugar a la carcajada franca, y a la vez es una película que tiene mucho de sentimental pero no en el sentido en que suelen tratarse, sino que está cogido a través de la naturalidad, la sencillez, tanto de los personajes como del trato del guión.  Los dramas de los protagonistas se utilizan no para compadecernos de ellos, sino para hacer humor, totalmente respetuoso.  La banda sonora también es otro acierto y una muestra más de los dos mundos opuestos de los protagonistas, la música clásica de Vivaldi, Chopin ante Earth, Wind & Fire y el soul más bailón.  En definitiva, una película que a pesar de no compartir varias de las cosas que había leído sobre ella, me ha hecho pasar dos horas casi sin enterarme y salir del cine de muy buen humor después de haber reído francamente.

The ecstasy of cinema